El que se mortifica exteriormente sin seguir el parecer del confesor, o caerá enfermo, o se volverá orgulloso, imaginándose que hace una gran cosa (San Felipe Neri)
El que se mortifica exteriormente sin seguir el parecer del confesor, o caerá enfermo, o se volverá orgulloso, imaginándose que hace una gran cosa (San Felipe Neri)