Debemos temer y huir las tentaciones de la carne, aún durante nuestras enfermedades, y en la vejez; porque el espíritu de incontinencia ataca sin descanso en todo tiempo, en todo lugar y a toda clase de personas. (San Felipe Neri)
Debemos temer y huir las tentaciones de la carne, aún durante nuestras enfermedades, y en la vejez; porque el espíritu de incontinencia ataca sin descanso en todo tiempo, en todo lugar y a toda clase de personas. (San Felipe Neri)